Reclutamiento y selección
Reclutamiento mixto: características, ventajas e inconvenientes
Hay tres tipos de reclutamiento mixto. ¿Quieres conocer sus ventajas y desventajas al detalle? Te explicamos sus características en el blog.
Reclutamiento y selección
Hay tres tipos de reclutamiento mixto. ¿Quieres conocer sus ventajas y desventajas al detalle? Te explicamos sus características en el blog.
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Mireya Ruiz
HR Consultant
14 de diciembre, 2022
Se produce una vacante en la empresa, y surge la misma incógnita de siempre. ¿Buscamos fuera de la organización o nos decantamos por el talento interno? Por suerte, no estamos obligados a elegir una opción. El reclutamiento mixto nos permite aprovechar lo mejor de ambas.
Aunque el objetivo siempre sea dar con el candidato adecuado para dicha vacante, no siempre se aplica correctamente el proceso de selección de personal.
Vamos a conocer sus características, pros y contras, además de ejemplos de reclutamiento mixto.
Como habrás deducido, el reclutamiento mixto es la combinación del reclutamiento externo y el reclutamiento interno en la adquisición de talento.
Cuando pensamos en reclutamiento de personal, lo primero que nos viene a la cabeza es la búsqueda externa. Sin embargo, muchas veces tenemos el talento dentro de la organización. Solo hay que darle una oportunidad.
El reclutamiento mixto pretende integrar las dos modalidades. El resultado son procesos selectivos más completos, lo que a priori facilita la selección del candidato adecuado.
Eso sí, este tipo de reclutamiento puede variar en función de la estrategia. Identificamos hasta 3 tipos de reclutamiento mixto:
Según la modalidad, se emplearán unos medios de reclutamiento interno y externo. Entre los primeros tenemos los planes de carrera, la publicación de vacantes mediante sistemas de comunicación interna, etc.
Entre los segundos, la web de empleo de la empresa, portales de empleo, programas de referidos… o llamar a la puerta del candidato.
Antes de analizar los pros y contras del reclutamiento mixto, vamos a ver el reclutamiento interno y externo con ejemplos. La sucesión de un mando por su subalterno sería un ejemplo del primero.
Pero si este propone como sustituto una persona sin relación con la empresa o contratamos a otro trabajador, es reclutamiento externo.
La gran ventaja del reclutamiento mixto es que tenemos lo mejor del reclutamiento externo y del interno.
Por ejemplo, los trabajadores llegados de fuera son un soplo de aire fresco. Pueden aportar nuevas ideas, una perspectiva diferente e innovadora que siempre nos ayuda a crecer. Sobre todo, si buscamos un cambio.
Entre las ventajas del reclutamiento interno que también se aplican al mixto destaca la motivación de los trabajadores.
El hecho de contar con planes de carrera, de promocionar en la empresa o de ver que su trabajo es valorado, es muy motivador. Esto no hace más que reforzar su motivación y el compromiso con la empresa.
A esto podemos añadir que evitamos el conformismo en la plantilla. Es una forma de estimular a los trabajadores para que abandonen su zona de confort y busquen una capacitación continua.
La empresa puede aportar su granito de arena, facilitando la formación y capacitación del talento que tiene en sus filas.
Más allá del desarrollo laboral, la organización conoce al trabajador que selecciona para ocupar una plaza.
Conoce sus puntos fuertes, los aspectos a mejorar, sus habilidades y forma de trabajar… y el trabajador conoce la empresa y a sus profesionales. Esto facilitará la adaptación al nuevo puesto.
Bien aplicada, esta estrategia nos ofrece un reclutamiento más eficaz y económico. Una de las ventajas del reclutamiento externo es acceder al talento que no tenemos en la organización. Así, cubrimos antes las vacantes, evitando las pérdidas económicas que supone tenerlas sin cubrir.
Antes de aplicar el reclutamiento mixto, hay que conocer sus limitaciones. Por ejemplo, cuando le damos prioridad al proceso de reclutamiento interno sobre el externo, podemos encontrarnos con un talento limitado.
Por eso es aconsejable mirar también más allá de la organización en busca de alternativas.
Otra desventaja del reclutamiento interno es la tendencia hacia la endogamia en el talento. Así, lo que a priori debería ser una forma de retener el talento, se puede convertir en un gran hándicap si la organización descarta el talento externo.
Por eso, es importante combinar las dos modalidades.
No podemos pasar por alto el peligro de la desmotivación en la plantilla. Además, es un peligro doble. Por una parte, la selección de trabajadores externos puede generar frustración o desconfianza entre la plantilla.
Por otra parte, los trabajadores que no promocionen se pueden estancar y acabar dejando la organización.
Para acabar, hay que tener claro que dos y dos no siempre suman cuatro. Un trabajador que rinde en un puesto no tiene por qué hacerlo en otro, por muy preparado que esté para ello.
Y cuando se promociona a un trabajador interno, tenemos otra vacante para cubrir. Si algo sale mal, recolocar al empleado en su posición anterior no siempre es posible.
Por suerte, contamos con soluciones como el software de RRHH de Sesame HR que facilitan el reclutamiento mixto.
Lo puedes utilizar como bolsa de empleo de candidatos, internos y externos. Pero también para analizar el desempeño de tu plantilla, planes de carrera, etc.
En el blog de Sesame HR te explicamos cómo sacar el máximo partido al reclutamiento mixto, ¡no te pierdas los contenidos sobre el tema!
Profesional con amplia experiencia de más de 20 años en diferentes áreas de los Recursos Humanos (Selección, Formación, Prevención de Riesgos Laborales, Gestión de Personal). Experiencia en Dpto de Dirección: Amplia visión de la empresa y los RRHH.