Control de gastos
Formación como retribución flexible: ¿cómo funciona?
La formación como retribución flexible te permite ofrecer beneficios personalizados a tus empleados. Descubre cómo implementar esta estrategia.
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La formación como retribución flexible te permite ofrecer beneficios personalizados a tus empleados. Descubre cómo implementar esta estrategia.
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Sara González
HR Consultant
25 de noviembre, 2024
Como director de RRHH, seguro que estás buscando formas de motivar y retener a tus empleados. Una manera de hacerlo es ofrecer formación como retribución flexible de tu empresa.
La retribución flexible se ha convertido en una herramienta cada vez más popular entre las empresas para atraer y retener talento, mejorar la satisfacción laboral y aumentar la productividad. Incluir la formación en este tipo de retribución no solo beneficia a los empleados al proporcionarles oportunidades de desarrollo profesional, sino que también fortalece la competitividad y la capacidad de innovación de la empresa.
En este artículo te explicaremos cómo incluir la gestión de formación en la retribución flexible de tu empresa. ¡Sigue leyendo para aprender más!
Un plan de formación es una estrategia estructurada y planificada que una empresa diseña para desarrollar las competencias, conocimientos y habilidades de sus empleados. Este plan tiene como objetivo principal mejorar el desempeño individual y colectivo dentro de la organización, alineando las necesidades de los trabajadores con los objetivos estratégicos de la empresa.
Podemos definir al plan de formación como una inversión estratégica que fortalece el capital humano de la empresa, mejorando su capacidad para alcanzar los objetivos empresariales y garantizando la satisfacción y el desarrollo continuo de los empleados. Implementarlo con un enfoque estructurado y adaptado a las necesidades organizativas es clave para su éxito.
Estos son los pasos que te recomendamos para implementar la formación en el plan de retribución flexible de tus empleados.
Para implementar un plan de formación en la retribución flexible en tu empresa, lo primero que debes hacer es analizar qué necesidades formativas tienen tus empleados.
Puedes realizar encuestas anónimas para conocer sus intereses, o evaluaciones de desempeño para detectar áreas de mejora. Una vez tengas claro qué competencias necesitas potenciar en tu equipo, podrás diseñar un plan de formación a medida.
Las acciones a realizar después son:
A la hora de establecer un presupuesto, ten en cuenta el coste de las actividades formativas que quieres implementar, así como otros gastos como:
Una vez tengas una estimación de costes, puedes decidir qué parte de tu presupuesto total de formación quieres dedicar a la retribución flexible.
Con un presupuesto asignado y las necesidades de tu equipo analizadas, es momento de elegir los cursos y actividades formativas que formarán parte de tu plan de formación en la retribución flexible.
Algunas opciones pueden ser:
Incluye una combinación de modalidades que se adapten a los distintos estilos de aprendizaje de tus empleados.
Por último, comunícale a tu equipo los detalles del plan de formación en la retribución flexible para motivar su participación. Explica cómo se ha diseñado con base en sus necesidades y el presupuesto asignado.
Transmite los objetivos y beneficios que supone para ellos y para la empresa. Es importante que primero realices una presentación formal del plan de formación, destacando los beneficios y las oportunidades disponibles.
Recuerda proporcionar materiales informativos, como folletos y guías, que detallen los cursos disponibles y los procedimientos para inscribirse.
Además debes utilizar diversos canales de comunicación, como correos electrónicos, reuniones de equipo, y la intranet de la empresa, para asegurar que todos los empleados reciban la información.
Por último, organiza sesiones de preguntas y respuestas para abordar cualquier duda o inquietud que puedan tener los empleados.
Un plan de formación como parte de la remuneración flexible ofrece ventajas fiscales tanto para el empleado como para la empresa, convirtiéndolo en una herramienta estratégica para optimizar costes y mejorar la satisfacción laboral. A continuación, se detallan las principales ventajas fiscales asociadas:
La formación financiada por la empresa está exenta de tributación en el IRPF del empleado, siempre que cumpla con las siguientes condiciones:
Al no considerarse retribución en especie, este beneficio no incrementa la base imponible del empleado, lo que le permite mejorar sus competencias sin afectar su salario neto.
Las empresas pueden acceder a bonificaciones a través de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE). El crédito formativo anual, basado en el tamaño de la empresa y su plantilla, permite recuperar parte del coste de la formación. Estas bonificaciones reducen las cotizaciones a la Seguridad Social, optimizando el gasto formativo.
Los gastos en formación son deducibles como gastos de explotación en el Impuesto sobre Sociedades, siempre que se justifiquen como necesarios para la actividad económica.
Al incluir formación en el plan de remuneración flexible el empleado utiliza parte de su salario bruto para acceder a formación sin pagar impuestos sobre esa cantidad. Esto le permite aumentar su poder adquisitivo y acceder a programas educativos de alto valor a un coste reducido.
La empresa puede ofrecer planes de formación como parte de la remuneración total del empleado, lo que incrementa su percepción de valor sin necesidad de incrementar su salario en efectivo. Al ser fiscalmente eficientes, estos planes ayudan a optimizar el presupuesto de Recursos Humanos.
Los planes de formación gestionados dentro de un esquema de retribución flexible aseguran el cumplimiento de las normativas fiscales y laborales, reduciendo riesgos de sanciones o conflictos con la administración.
Ofrecer formación en idiomas como beneficio es algo muy valorado por los empleados. Si tu empresa tiene clientes o socios en el extranjero, dominar otros idiomas es una habilidad muy útil para tus trabajadores.
Puedes ofrecer cursos de inglés, francés o alemán, por ejemplo. Algunas opciones:
Las habilidades blandas son fundamentales para el éxito de cualquier profesional. Ofrecer formación en comunicación, liderazgo, trabajo en equipo o gestión del tiempo puede marcar una gran diferencia. Algunas ideas:
La formación en la especialidad de cada puesto es imprescindible para mantener a los empleados actualizados con las últimas tendencias. Puedes ofrecer:
Ofrecer una amplia gama de opciones de formación como parte de un plan de retribución flexible es una gran manera de motivar y retener a tus empleados.
La formación es un beneficio que muchas empresas ofrecen actualmente dentro de su programa de retribución flexible, ya que tiene muchos beneficios.
Cuando tus empleados acceden a programas de formación de alta calidad, adquieren nuevas competencias y conocimientos que pueden aplicar directamente en sus puestos de trabajo.
Esto se traduce en un mejor desempeño y mayor productividad, lo que repercute positivamente en los resultados de la empresa.
La inversión en la formación de los empleados es una de las mejores formas de fomentar su compromiso y lealtad.
Al brindarles la oportunidad de desarrollarse profesionalmente, les demuestras que la empresa valora su crecimiento y bienestar.
Ofrecer formación como parte de la retribución flexible es también una excelente estrategia para atraer a los mejores candidatos.
Los profesionales altamente cualificados valoran las oportunidades de aprendizaje y desarrollo, por lo que es más probable que elijan trabajar en empresas que invierten en la formación de sus empleados.
La formación continua permite a los empleados actualizar sus conocimientos y habilidades para adaptarse a los constantes cambios tecnológicos y metodológicos.
Esto garantiza que tu equipo esté siempre a la vanguardia, lo que representa una gran ventaja competitiva para la empresa.
Sin duda, incluir la formación dentro de tu programa de retribución flexible reporta múltiples beneficios tanto para la empresa como para los empleados.
La formación es uno de los beneficios más valorados por los empleados dentro de los planes de retribución flexible. Sin embargo, gestionarla de forma eficiente puede resultar complicado si no se dispone de las herramientas adecuadas.
Con un software de RRHH como Sesame HR, puedes digitalizar y automatizar todo el proceso de planificación de acciones formativas. Además, toda la información almacenada en un único sistema, podrás optimizar la gestión del presupuesto anual de formación.
Con las herramientas adecuadas, como el software de RRHH de Sesame HR, podrás gestionar la retribución flexible y la formación de forma sencilla y eficiente.
Si quieres optimizar la gestión de las formaciones como retribución flexible en tu empresa, regístrate, solicita una prueba gratuita de 14 días de Sesame HR y compruébalo por ti mismo.
Ricardo López ha forjado una carrera sólida en el ámbito de recursos humanos, destacándose en la administración de nóminas, gestión de relaciones laborales, y asesoramiento en el área de empleo. Su formación académica en derecho laboral y recursos humanos, combinada con su experiencia en empresas como Zeus - Smart Visual Data, Sesame HR, y Grupo Noa's, le ha permitido desarrollar una comprensión integral de la dinámica laboral y la gestión de personal.
Con una experiencia de más de 10 años, ha desarrollado una habilidad probada en la administración de beneficios, la documentación de recursos humanos, y la orientación laboral, Ricardo sigue contribuyendo al desarrollo eficiente y humano de las organizaciones en las que trabaja.