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Al contrario de la creencia que ha circulado durante décadas que reducía la figura del middle manager a cualquier expresión sinónima de “mediocridad” o “manager wannabe”, en la actualidad su rol en las empresas es tan vital que las organizaciones no podrían avanzar sin antes consolidar estos puestos. Su función, en términos generales, es alcanzar […]
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Mireya Ruiz
HR Consultant
26 de agosto, 2022
Al contrario de la creencia que ha circulado durante décadas que reducía la figura del middle manager a cualquier expresión sinónima de “mediocridad” o “manager wannabe”, en la actualidad su rol en las empresas es tan vital que las organizaciones no podrían avanzar sin antes consolidar estos puestos.
Su función, en términos generales, es alcanzar los objetivos de un proyecto de la forma más eficiente y “leve” posible y servir de vía para que la comunicación entre CEOs, managers y equipos sea efectiva y omnidireccional. Vamos, que sirve de unión para los diferentes niveles de una empresa y, además, es la figura que consigue que las “cosas pasen” en cada departamento.
Para que se entienda mejor nos adentraremos en el mundo ficticio de George R. R. Martin, Juego de Tronos, donde la figura de La Mano sería la representación exacta del middle management dentro de los Siete Reinos. Es el contacto del pueblo con la realeza, pero también es quien se encarga de compartir el mensaje de los altos cargos con aquellos más bajos. Reúne cualidades de liderazgo y gestión, y rompe con las distancias preestablecidas.
Además, si algo hemos podido aprender de este rol, es que hace falta mucho más que grandes conocimientos y experiencia para poder…¿sobrevivir a él? Hay ciertas habilidades blandas que no pueden faltar en cualquier middle manager : debe contar con altas capacidades comunicativas, poseer cualidades “humanas” y cercanas, y ser capaz de moderar y mediar en todo tipo de situaciones.
Empecemos con lo básico, la comunicación interna. Dejaré las cosas claras, no vale con tener buenas habilidades comunicativas, aquí se viene a brillar. Un middle manager tiene que servir como amplificador de las voces que necesiten llegar a los cargos más altos de la organización. La clave está en amplificar, es decir, se empodera a los equipos, se les invita a compartir desde cualquier preocupación hasta sus más extravagantes ideas y se les asegura que su exposición no será en vano.
Esto es de primero de Consejo Privado, si La Mano no comunica las inquietudes del pueblo a sus componentes, ¿cómo van a ser éstas tenidas en cuenta? La función comunicativa quizás sea la más desafiante, pero a su vez es la más constructiva y gratificante. Ayuda a las posiciones de más poder a guardar un contacto más cercano y directo con todas las personas que conforman una empresa, otorgando una visión más completa de la situación general que será de gran ayuda a la hora de desarrollar cualquier estrategia empresarial.
Un boost en empatía para llegar a todos los lados. En una organización hay tantos frentes abiertos como personas. Ser capaz de conectar con las inquietudes de cada una de ellas, es labor esencial de todo middle manager. Empatizar con cada situación pondrá en perspectiva tanto las necesidades generales como las particulares -así como los objetivos y su grado de prioridad-, una gran ayuda en el momento de repartir las cargas dentro de los equipos de una manera más equitativa y en pos de las metas establecidas.
Valorar el trabajo colaborativo, tener consciencia de la realidad de cada miembro del equipo y, todo ello, sin perder de vista los objetivos de la organización, es todo un reto, pero necesario. Se trata precisamente de ser capaces de cumplir los propósitos de una compañía involucrando a cargos de todos los niveles en cada fase del proceso.
Y este es el punto en que hace su aparición estelar Tyrion Lannister, sin duda la mejor Mano de los Siete Reinos. ¿Por qué? Si hago una lista de las diez personas con mayor capacidad de mediación él se situará, sin duda, entre los primeros puestos. Evaluación y equilibrio son la clave para resolver cualquier problema sin que éste nos estalle cual Septo de Baelor.
En cualquier organización no solo encontraremos diferentes ideas o formas de abordar un proyecto, sino que en gran parte de las ocasiones las encontraremos totalmente opuestas. Es aquí donde se hace más imprescindible contar con el rol que conecta las necesidades de los niveles más altos con los bajos y viceversa. Mediar en este tipo de situaciones está en la agenda diaria de cada middle manager.
A estas alturas no creo que haga falta recalcar la importancia de los roles intermedios dentro de las empresas, sobre todo en aquellas que están en proceso de crecimiento. Conectar a todos los niveles, tener un mapa detallado de la situación de cada departamento y persona que forma parte de él y contar con el cargo capaz de moderar en cualquier situación, es tan importante como hacer la elección correcta de la persona que ocupe el rol.
No es hora de escatimar. Es hora de empoderar, de ofrecer programas de desarrollo que se centren en el liderazgo, que ayuden a esas personas llenas de talento a evolucionar en sus puestos y convertirse en las y los líderes de sus equipos. Invertir el esfuerzo de consolidar estos roles, será la mejor vía para mantener la motivación y salud de las personas que están a nuestro cargo. ¿Qué le decimos a quienes continúan subestimando la figura del middle manager? Not today, not anymore.
Profesional con amplia experiencia de más de 20 años en diferentes áreas de los Recursos Humanos (Selección, Formación, Prevención de Riesgos Laborales, Gestión de Personal). Experiencia en Dpto de Dirección: Amplia visión de la empresa y los RRHH.
Soy Miguel Ángel Díaz, consultor de
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