México
Brasil
EEUU
Colombia
Chile
Costa Rica
Perú
España
Francia
Alemania
Reino Unido
Italia
Países Bajos
PortugalNóminas
Pensión contributiva: ¿cómo tu cotización impacta en tu futura jubilación?
Descubre qué es la pensión contributiva y por qué es tan importante para el futuro de tu jubilación. ¿Cómo se debe gestionar en las empresas?
¿Necesitas ayuda?
Ronny Navarrete
HR Consultant
5 de marzo, 2025
La jubilación es un hito fundamental en la vida laboral de cualquier trabajador. Sin embargo, la cantidad que se reciba en ese momento depende de las cotizaciones que haya realizado a la Seguridad Social. La pensión contributiva es el principal mecanismo para garantizar una renta tras el retiro, por eso entender su funcionamiento es clave.
¿Quieres saber todo sobre qué es la pensión contributiva? Aquí te explicamos cómo influye la cotización y cómo gestionarla. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la pensión contributiva?
La pensión contributiva es una prestación económica que se concede a los trabajadores cuando alcanzan la edad de jubilación, siempre que hayan cumplido con un periodo mínimo de cotización. Su objetivo es proporcionar estabilidad financiera a las personas que han contribuido al sistema de Seguridad Social durante su vida laboral. Algunas de las características principales son:
- Requiere cotización previa: para acceder a ella, es necesario haber aportado un número mínimo de años a la SS.
- La cuantía dependerá del tiempo cotizado y del salario sobre el cual se hicieron los aportes.
- Hay que tener en cuenta de qué tipo de pensión contributiva se trata.
Diferencias entre pensión contributiva y no contributiva
A diferencia de la pensión contributiva, que se basa en las cotizaciones realizadas por el trabajador y su empleador, la pensión no contributiva está destinada a personas que no han cotizado lo suficiente para acceder a la contributiva pero se encuentran en situación de necesidad. Otras diferencias son:
| Característica | Pensión contributiva | Pensión no contributiva |
| Requisito principal | Haber cotizado a la Seguridad Social (mínimo 15 años) | Carecer de recursos suficientes |
| Tipos | Jubilación, incapacidad, viudedad, orfandad | Jubilación e invalidez |
| Edad para jubilación | 65 años y 10 meses (puede variar) | 65 años o más |
| Financiación | Cotizaciones de trabajadores y empresas | Presupuestos Generales del Estado |
| Cuantía | Basada en las cotizaciones realizadas | Fijada anualmente (7.905,80€ en 2025) |
| Revalorización 2025 | 2,8% | 9 |
| Cobertura adicional | Varía según el tipo de pensión | Asistencia médica y farmacéutica gratuita |
| Duración | Generalmente indefinida | Mientras se cumplan los requisitos |
| Gestión | Seguridad Social | Comunidades Autónomas (excepto Ceuta y Melilla) |
Requisitos para acceder a una pensión contributiva
Para acceder a la pensión contributiva se necesita cumplir con ciertas características como:
- Tener la edad mínima requerida para la jubilación contributiva, la cuál varía en función de los años cotizados. Así pues, esta edad está fijada entre los 66 años y 6 meses para quienes hayan cotizado menos de 38 años y 3 meses, y en 65 años para aquellos que superen ese periodo de cotización.
- Tener el período mínimo de cotización necesario,es decir, un mínimo de 15 años, de los cuales al menos dos deben estar dentro de los últimos 15 años previos a la jubilación.
- Dependiendo del tipo de jubilación (anticipada, parcial, forzosa, etc.), pueden aplicarse condiciones específicas adicionales.
¿Qué tipos de pensiones contributivas existen?
Las pensiones contributivas se financian con las aportaciones realizadas durante la vida laboral del beneficiario y su cuantía varía en función de los años cotizados y la base reguladora de la nómina. Algunas de las más comunes son:
Pensión de jubilación
Uno de los principales tipos de pensión contributiva es la de jubilación, que se otorga cuando una persona alcanza la edad establecida por la ley y ha cotizado el tiempo mínimo requerido. Ésto garantiza un ingreso mensual al trabajador tras su retiro, permitiéndole mantener su calidad de vida una vez finalizada su etapa laboral.
Pensión de incapacidad permanente
Otra importante es la pensión por incapacidad permanente, que se concede a aquellas personas que, debido a una enfermedad o accidente, quedan parcial o totalmente inhabilitadas para trabajar. Dependiendo del grado de incapacidad, esta pensión puede ser parcial, total, absoluta o de gran invalidez, según el impacto que tenga la condición del beneficiario en su capacidad para desempeñar una actividad laboral.
Pensión de viudedad
También existe la prestación de viudedad, destinada a la pareja de una persona fallecida que haya cotizado el tiempo necesario. Esta pensión contributiva busca proteger económicamente a la persona que dependía del fallecido, ya sea cónyuge, pareja de hecho o, en algunos casos, excónyuge.
Pensión de orfandad
Asimismo, la pensión de orfandad se otorga a los hijos menores de edad o con discapacidad en caso de fallecimiento de uno o ambos progenitores. Por último, está la pensión en favor de familiares, que se concede a ciertos familiares que dependían económicamente del fallecido, como padres o hermanos, siempre que cumplan los requisitos establecidos.
¿Cómo se calcula la pensión contributiva?
Para calcular la pensión contributiva se empieza por conocer la base reguladora, que es el resultado de dividir la suma de las bases de cotización de los últimos 25 años entre un coeficiente fijado por la Seguridad Social.
Después se aplica un porcentaje en función de los años cotizados, comenzando en el 50% con 15 años y aumentando progresivamente hasta el 100% con 37 años cotizados. Así pues, un trabajador con una base reguladora de 2.000€ y 35 años cotizados recibiría aproximadamente el 97% de su base, es decir, 1.940€ mensuales.
Factores que pueden reducir tu pensión contributiva
Entre los factores que pueden afectar a la pensión contributiva están:
- Los periodos sin cotizar pueden reducir la base reguladora y, por ende, el importe final de la pensión.
- Penalizaciones por jubilación anticipada, que puede reducir la cuantía entre un 6% y un 8% anual.
- Efectos de la cotización por bases mínimas, ya quedisminuirá la cuantía final.
Por ello, si se quiere incrementarla es recomendable aumentar la base de cotización en los últimos años laborales, pudiendo incrementar la pensión hasta un 4% por cada año trabajado.
¿Cómo puede ayudarte Sesame HR en la gestión de tus cotizaciones?
Sesame HR es un software de RRHH que puede ayudarte en la gestión de tus cotizaciones y contribuciones a la seguridad social de varias maneras, especialmente si eres empleador o gestor de RRHH. Puede mejorar la gestión de contribuciones para la pensión contributiva de la siguiente forma:
- Genera reportes detallados y actualizados sobre las cotizaciones de cada empleado.
- Calcula automáticamente los aportes a la seguridad social según el salario y categoría laboral.
- Facilita la gestión y pago de las cotizaciones a la SS desde un mismo lugar.
- Controla bajas médicas, permisos y otros factores que pueden afectar las cotizaciones.
- Se integra con otras herramientas de nómina para calcular deducciones o bonificaciones.
- Garantiza que los registros de cotizaciones estén actualizados y accesibles.
- Reduce errores administrativos en la presentación de documentos
Una correcta gestión de las cotizaciones es fundamental para asegurar una pensión contributiva adecuada. Con herramientas como Sesame HR, puedes optimizar esta tarea. ¡Accede a nuestra prueba gratis durante 14 días y lleva un control eficiente!
¿Necesitas ayuda?
Soy Sara González, consultora de
Recursos Humanos en Sesame HR. Reserva una reunión con mi equipo para ayudarte.
Deja una respuesta